viernes, 4 de julio de 2014

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¿Yoghismo?
                 Hoy, muchos tomamos referencia de las enseñanzas de un ser humano especial, El Maestre Serge R. De La Ferriere, que dejo mucho escrito en libros, pero aún más importante, su enseñanza directa de labio ha oído, viva en sus discípulos y los discípulos de los discípulos…Esto es un legado, un linaje que tiene su fuerza y Sello,  además depende de una relación autentica de Maestros y Discípulos.  En su libro Yug Yoga Yoghismo da una definición del sistema Yoga, contundente. “El YOGHISMO es un trabajo de perfeccionamiento espiritual y la YOGA (del sánscrito yug: unión, conexión, unificación) es una filosofía trascendental”, es decir: un modo de existencia que afronta la solución de las dificultades para encarar la vuelta a la esencia, a conectarse con el alma individual y a partir de esa experiencia al alma universal. El yoga bien encarado resuelve  las inquietudes más profundas y los problemas reales de la vida cotidiana.
                 En la a actualidad, seguimos confundiendo al FAKIR con el YOGHI,  como decía el Maestre, solo que ahora se da en Occidente en una nueva versión diluida: acrobacias, yoga competición, danza yoga, yoga con pelotas, Hot yoga, diplomados, capacitaciones, gurús sin tradición, mucha imagen en las redes sociales; incluso algunos, con buenas técnicas que tomaron de alguna tradición real, con algo en común, casi todo con fines personales y de lucro. Todo esto tiene su valor y son útiles, alternativas interesantes pero en general más cercanas a lo deportivo, además todo aporta y para mucha gente resulta positivo, incluso no se puede afirmar que algo es mejor o peor …todo es relativo, en esto no hay competencia, excepto, para los que pelean por un mercado al que quieren cautivar, y eso realmente  nos hace perder el verdadero sentido del Sistema Yoga.
                 Lo que surge de la misma fuente debería ser sano y creativo, pero a veces se alejan de la línea del Yoghismo que nos propone el Maestre, también de las grandes Escuelas del pasado y el presente. Los mismos ejercicios practicados con otro sentido y con algún tipo de intercambio, terminan en una limosna que se recibe por el producto que se le brinda, algo de moda en la actualidad especialmente en occidente.  Dice el Maestre: “Sin embargo, la diferencia es enorme entre el FAKIR, cuyo objetivo es provocar con fines de lucro la admiración en sus espectadores, y el YOGHI que permanece aislado en la práctica de sus ejercicios, porque su objetivo es exclusivamente espiritual, más aún, místico. Cuando hay demostraciones públicas se trata entonces de “fakirismo” (lo cual no es sino la obra de un hábil manipulador practicante de “ilusionismo” o de buena “prestidigitación”), mientras que el Yoghismo sólo se presenta en público con el objeto de impartir enseñanza”. 
              Una enseñanza netamente espiritual al servicio del planeta. Si seguimos estudiando al Maestre llegaremos a la misma conclusión. “La palabra YOGA debe ser comprendida como re-ligar, esta vía que conduce a la liberación (MOKSHA), Todo el trabajo de perfeccionamiento se hace con el fin de destruir las impurezas (MALA), y de suprimir la ilusión (MAYA), para alcanzar la emancipación final (MUKTI), lo cual se logra mediante la conquista de este estado de la supra-consciencia,  denominado SAMADHI (Conciencia-Divina).”
               Parafraseando, podríamos decir que no habiendo “recompensa” en Yoga, tomado desde un autentico Yoghismo, se hace difícil popularizarlo, pues lo común en nuestra sociedad, hace parecer que ejercido como herramienta espiritual, carecería de sentido. Ya naturalizamos tanto él,  “te doy para recibir”, que  todo termina teñido de ese vacío espiritual que cubre, como un velo, nuestro mundo “normal”.  Pero en realidad dentro de un planteamiento de transformación, de búsqueda de felicidad,  realización y del posible encuentro de la esencia sublime en nosotros, que viene de la fuente que nos da vida, entonces la  maestría en el manejo de los 4 elementos que nos proporcionan las “ramas” básicas del yoga presentados por el Maestre como: Gnani, Para Bhakty, Karma y Hatha; dan a entender un objetivo más noble, una aspiración más sana, una obtención de un ideal más bello y más estable; en tal caso, naturalmente, el verdadero discípulo sabe la razón de su esfuerzo, porque lo que encuentra en el camino es tan valioso, que nada podría “pagarlo”, solo surge el agradecimiento y la necesidad de compartir la experiencia sin pedir nada a cambio, ni reconocimientos, solo la oportunidad de servir… 
Gurú Constancio
 10-6-14

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