martes, 23 de octubre de 2018

Cartas de Coatepec 7

       Los días cercanos al 22 de septiembre fueron tan maravillosos que siento que debo compartir un poco, por el gusto de volver a disfrutar algunos momentos, y también para felicitar a todos los que realizaron el esfuerzo para ese evento.

Tuvimos muchas personas en el ashram, entre hermanos budistas que vinieron a sus prácticas y la reunión de zona de la RedGFU, más de 270 personas. Así que había sido una semana de mucho trabajo y responsabilidad, preparando las instalaciones, pero con la alegría y el gusto de servir que tiene el Comité con sus directores. La parte más bella se presenta cada vez que vemos una obra terminada en el ashram, cuando llegan los hermanos y la pueden aprovechar.

       Todo fluyó muy bien. El 22 de septiembre, día de los Arhat, pasaron algunas cosas interesantes. Cantamos con alegría Las mañanitas por la conciencia de Sat Arhat en el mundo, en este caso en la persona del Maestro Don Gustavo Toro Uribe, que estuvo presente en línea. Lo curioso es que al Gurú Lucy Cordero le salió en el Ceremonial lo mismo que a este servidor. Una gran coincidencia, porque entre tantos libros sagrados y escritos de sabiduría, pensamientos del Maestre de la Ferriére, Dama Pada, la Biblia, el Tao Te King, los pensamientos de Buda que tenemos en el libro electrónico, el trozo de lectura que nos salió tiene muy pocas posibilidades de aparecer, y justo a dos Gurús el mismo día, a la misma hora, se nos presentó al 'azar'.

¿Qué hay de importante para aprender en esta parte del Dios de la naturaleza de Baruch Spinoza?:

           "Te he hecho absolutamente libre, no hay premios ni castigos, no hay pecados ni virtudes, nadie lleva un marcador, nadie lleva un registro.

Eres absolutamente libre para crear en tu vida un cielo o un infierno.


No te podría decir si hay algo después de esta vida, pero te puedo dar un consejo. Vive como si no lo hubiera. Como si esta fuera tu única oportunidad de disfrutar, de amar, de existir.

Así, si no hay nada, pues habrás disfrutado de la oportunidad que te di. Y si lo hay, ten por seguro que no te voy a preguntar si te portaste bien o mal, te voy a preguntar ¿Te gustó?… ¿Te divertiste? ¿Qué fue lo que más disfrutaste? ¿Qué aprendiste?…

Deja de creer en mí; creer es suponer, adivinar, imaginar. Yo no quiero que creas en mí, quiero que me sientas en ti. Quiero que me sientas en ti cuando besas a tu amada, cuando arropas a tu hijita, cuando acaricias a tu perro, cuando te bañas en el mar.

Deja de alabarme, ¿Qué clase de Dios ególatra crees que soy?

Me aburre que me alaben, me harta que me agradezcan. ¿Te sientes agradecido? Demuéstralo cuidando de ti, de tu salud, de tus relaciones, del mundo. ¿Te sientes mirado, sobrecogido?…

¡Expresa tu alegría! Esa es la forma de alabarme”…

       Este filósofo fue y sigue siendo impactante. Pese a que vivió y expresó su pensamiento casi 370 años atrás, resulta tan acuariano que aun hoy nos ayuda a romper muchas estructuras obsoletas.

      ¿Podemos vivir con tanta libertad y sentir a Dios así, dentro de uno y verlo en el otro?

      ¿Será que estamos libres de hacer casi todo lo que queramos de acuerdo con nuestra conciencia, y no existen esos lugares con los que nos amenazaron durante tanto tiempo, donde sufriremos el castigo divino si no hacemos lo que indican algunas personas?

¿Cómo podríamos desarrollar la conciencia sin ser originales, auténticos, experimentando por nosotros mismos, siendo más o menos  libres?

Muchas veces nos comportamos bien o correctamente solo por miedo,  en función de costumbres o por imagen; una doble moral que nos lleva a la hipocresía, asunto que se considera 'natural y necesario' en la sociedad.

Esto es en parte lo que trata de liberar Spinoza, expresando no hay castigos, anímate a vivir lo que necesites y quieras, ya que el desarrollo de la conciencia no se puede dar inconscientemente. Justamente la iluminación tiene que ver con descubrirse en el Ser, absolutamente libres.

      De todos modos, podemos comprobar y confirmar que si tomamos conciencia de las leyes que mueven el universo, cada uno puede hacer de su vida prácticamente lo que necesite, transformarla en un paraíso o en un infierno.

Ser y vivir libres es difícil porque nos apegamos a las personas, a las cosas, a las relaciones, a los sentimientos. Todo ello nos esclaviza, restringe nuestra libertad; por lo tanto, no otorgamos esa libertad y perdemos lo que más disfrutamos y necesitamos los seres humanos, ser libres y dejar brotar la vida que nace de nuestra alma.

      Para colaborar a que todo esté mejor dentro de nosotros mismos y en el planeta, funcionaron las tres Cámaras Secretas del ashram. Fue una fiesta llena de alegría, con mucho aprendizaje, gracias a que cultivamos el ego y el ser con diferentes técnicas y la oportunidad de profundos vínculos humanos.

El 23 siguió el ambiente de amor. Varios hermanos recibieron honorificaciones por el esfuerzo que hacen por superarse a sí mismos y por el servicio a otros seres humanos. Todo estuvo cargado de emociones. Cada uno de ellos fue aplaudido por toda la hermandad. Entre ellos estaba el nieto del Hermano Mayor, Dr. José Manuel Estrada. Él paso su niñez en el Ashram de Coatepec y es un honor que forme parte de la Orden del Acuarius.

     Otra noble dama, aún en recuperación postoperatoria, se presentó y nos sorprendió. Aunque todos los que recibieron una honorificación son igual de importantes, y cada uno recorrió un camino de superación dentro de sí mismo, un hermano noble y especial que fue honorificado esa tarde me contó emocionado, compartiendo el paseo de domingo, cómo  y por qué había llegado al ashram. Sus palabras fueron más o menos estas:

“Un día estaba tan desesperado debido a una crisis depresiva de pareja, mal en los negocios y en la vida, que le pedí, angustiado, ayuda al Hermano Mayor. Lo hice porque un amigo que había estado en la RedGFU hace muchos años me había hecho escuchar viejos casetes del Maestro Don José Manuel Estrada, recomendándome que si alguna vez necesitaba ayuda para el alma que se la pidiera al Maestro, que él respondía de alguna manera. A las pocas horas de solicitar esa ayuda, escuché una voz en mi mente que parecía la del Hermano Mayor, que decía muy claramente "Ponte al servicio de la GFU". De repente, sentí el impulso de seguir esas palabras. Como me había aconsejado el hijo del Maestro Estrada que viniera a este ashram, tomé un vuelo y aquí estoy en Coatepec.

Así de simple y hermoso. Es morador, pasó de estar en crisis a empezar a encontrar respuestas; está brindando un gran servicio al lugar, ingresó a Yamines y ya es MG, habiendo vivido varias experiencias valiosas para su alma en estos meses.

     Esa es la función de un lugar como el ashram de Coatepec. Mucha gente llega en una búsqueda, con una carencia profunda, y encuentra su propio camino luego de un tiempo en este lugar. Parecen cosas de cuentos sentimentales, pero resulta que no es así.

Conozco tantas situaciones similares de cómo se mueve esa invisible realidad cuántica, que debo decir que resulta maravillosamente mágico la manera en que opera el universo, cómo asiste de diferente manera a las personas que lo solicitan con honda necesidad.


Maestro, ¿vivimos en una mentira?

       Bueno no podría decir que es exactamente así, aunque en algunas culturas y enseñanzas antiguas se afirma que todo es maya, ilusión. También podemos afirmar que mucho de la ´realidad´ aparente que vivimos es un espejismo, no solo porque es efímera, sino porque muchas veces deformamos el escenario y las cosas las vemos según nos explicaron y además teñida por la estructura que creó nuestra mente.

Esa estructura hace que seamos manipulables los seres humanos; por eso sucede que si una mentira es repetida incesantemente, la terminamos creyendo como verdad. Si lo hacemos con mucha gente, entonces se puede transformar en parte de nuestra cultura; si además la pasamos de generación en generación, también se puede transformar en tradición. Por eso hay tradiciones basadas en algo que no fue real.

Creamos algunas veces una entelequia, una realidad inexistente; hasta se podría afirmar que nos encontramos en una sociedad donde casi nada es totalmente real, auténtico, especialmente porque en lugar de ser nosotros mismos, permitimos seguir alienamos por el sistema.

Como expresó el poeta Ramón de Campoamor: “En este mundo traidor, nada es verdad ni mentira, todo es según el color del cristal con que se mira”. La moral es relativa a la época y a la cultura adquirida, por eso, esa ´moral´ nos puede llevar a vivir en un completo error y fuera de la armonía con el Universo y nosotros mismos; incluso aunque moleste hay que aceptar que algunas tradiciones pueden ser hasta ridículas.

En un universo donde lo único permanente es el cambio, ¿dónde quedan algunas tradiciones?, ¿dónde queda la moral de otros momentos?, ¿dónde  quedan costumbres sanas y constructivas de otras épocas?

      Muchas verdades del pasado ya no sirven o no se pueden aplicar al presente. Hay que renovarse permanentemente si se quiere vivir en presente. Tiempo y espacio reales solo existen en el completo presente y muchas de las influencias que recibimos del medio donde crecimos nos llevan a vivir fuera de la existencia y alejados de una vida en armonía con el Cosmos. Decía el Maestro Don José Manuel Estrada, "La verdad es un conjunto de verdades y mentiras".

           La verdad es tan poderosa, que no necesita armas para andar por el mundo...

     Gurú Constancio                                   Ashram de Coatepec  7-10-18

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