martes, 7 de abril de 2015

Compartiendo el Sendero 24

                   El amor es la energía más maravillosa y renovadora del universo, porque mueve las fibras más profundas del ser, acaricia lo humano y repercute en todo. Dejar fluir esta energía nos lleva a la felicidad con plenitud; es que todos tenemos mucho para dar, de variables e infinitas maneras, solo debemos limpiar nuestros nadis, esos canales que se van obstruyendo, ya desde la infancia, se bloquean un poco, se ensucian con miedos, culpas, resentimientos, olvidos, dolores, abandono, soledad, heridas…Debemos reeducarnos, utilizar nuestra capacidad de resiliencia y reconciliarnos con la vida para volver al amor, nuestra verdadera esencia. 
        
Lima. Visitar un lugar y encontrar gente confiable de la RedGFU es como siempre llegar a casa. Es que a veces viajar tanto puede ser un poco difícil y agotador, pero centrándose en el presente, en cada instante y lugar, todo se combina para encontrar momentos mágicos en todas partes, y se vuelve gustoso.
Cuando se está al servicio de lo que sugiere la vida, parece que el universo conspira para mimarnos. Meditar mirando el atardecer, con el sol acostándose en el mar, es algo único. Las olas se van calmando, el juego de colores cambia, el movimiento, las nubes, las luces y las sombras combinan infinitas formas, dibujando representaciones de luminosidad, en instantes efímeros y sublimes.

La energía se multiplica en todas partes, cambiando de matices, moviéndose en las olas. Así, en ese panorama, aparecen desde el alma y el silencio los mantras… Al rato vuelas en una gaviota que miras por unos segundos eternos, siendo uno con ella; te vuelves ola, viento, nube y luego te haces uno con todo. Si te conectas un poco con la fuente en ti y fuera de ti, llega la profunda paz y estado de plenitud sin tiempo, y cuando sonríes porque fluye el estado de santosha, (contentamiento) y la brisa te acaricia el rostro y la luz penetra en tu ser, ya no necesitas más nada. Todo está ahí, en el maravilloso presente.
Recordando al Maestro José Marcelli, viviendo parte de su enseñanza con respecto a los mantras de la Tradición.
           !AUM! Las 3 fuerzas que fluyen desde el principio de los tiempos sin principio, el mantra sagrado, resume todo. Lo que Somos y lo que nos une a todo lo que fuimos y a lo que nos falta Ser, para Ser Uno, en las infinitas dimensiones, donde estamos ensayando las posibilidades de Ser, desde siempre, sin agotarlas nunca. Silencio.
            Luego el ¡AUM, MANI PADME HUM, H´RI! Que es una invocación realmente especial, indica el camino que debemos recorrer en nuestro interior porque cuando elegimos ir a lo superior fuera y dentro de nosotros, entonces comienza el trabajo sutil de este maravilloso mantra, cuyo significado es, reverencio a la Luz que brilla sobre el Loto (Sabiduría) de mi Corazón… y ese loto, es el que hace florecer la Vida en cada día y la oculta en cada noche. Al final la sílaba H´Ri es el Mandato o solicitud de socorro en el encantamiento. Silencio.
            ¡AUM WAGUI,  SHORI HUM! El señor de la palabra manifestado en dos, pero indivisible. La Luz que brilla en el Loto de mi Corazón llena el Cosmos Total. Vamos hacia el infinito fuera de nosotros y volvemos al infinito dentro de nosotros, buscando la divinidad. H'um: La pareja, la duplicidad.  Es el estado del yoghi, que habiendo llegado al control absoluto de las facultades puede tener el goce de todos los placeres sin restricciones. Silencio.
            ¡SHANTI OM! Gracias al Todo… en todo y en mí. Agradecemos a la dualidad en la persona y a la vez en la conciencia Crística o Búdica. Siempre hay algo por lo cual agradecer a la fuente de la vida: respirar, mirar un amanecer, una sonrisa, un abrazo, infinitas cosas que nos suceden, si apreciamos un poco la vida. La belleza de la gratitud fluye en este sonido que sale desde el alma y se dibuja en una gran sonrisa en el rostro, llenándonos de plenitud, al final de la meditación. Silencio.
Con la atractiva práctica de un camino de Iniciación, que es la unión indivisible del método y la sabiduría, podemos transformar el cuerpo, emociones, verbo y mente profana; al cuerpo, emociones, verbo y mente pura y exaltada de un Buddha o de un Cristo.
Silencio es la clave para entrar en la primera Cámara secreta, aunque eso es una gran logro y hay que valorarlo mucho, nada garantiza que se encuentren las claves de las Cámaras, porque cada ser humano debe recorrer su propio camino interior dentro de ellas, además debe merecer encontrar el principio de la conexión con el penetrante y maravilloso silencio.
En Perú todo está recomenzando y de la mejor manera; todo vuelve a fluir, se acerca gente a los talleres y a las prácticas, la hermandad leal sigue adelante, con muchas lecciones aprendidas, que dan la ventaja de saber por dónde seguir.
            Durango. Una hermosa y gran casa sede, propiedad de la RedGFU, con todo lo necesario,  construida para esta maravillosa función de servicio a la sociedad. Les llevó más de 20 años dejarla tan bonita y práctica. La recepción con el canto de los karis, la alegría en los rostros y una buena cena con músicos en vivo hacen que todo se vuelva especial; es que llegas al hogar y están de fiesta. Visitar un lugar para dar un poco de servicio de parte de la Orden del Acuarius, al que lo quiera recibir, es un gusto, especialmente porque hace varios años, pasamos por aquí con el Ballet del Gagpa Viviana Pini, Pasión y Danza, y el trato fue tan bueno, la organización tan eficiente, que llenaron dos funciones de un teatro espectacular y la RedGFU ganó con el esfuerzo de todos, difundiendo el arte.

Pero la calidez y la generosidad que tiene la hermandad no se puede olvidar y hay que retribuir; nada tan adecuado como el agradecimiento. Por eso el Ceremonial es algo tan excepcional. Servimos de puente a un poco de luz, para que influya positivamente en todo aquel que se acerque, para que se expanda por la ciudad y el lugar, como lo más excelso de nuestro servicio.

Así, con esos pensamientos, comienza y vamos mirando el amanecer mientras fluye el Ritual. Aparecen cientos de golondrinas en el cielo, por la izquierda, volando en círculos espirales; aparece el sol por la derecha y alumbra y acaricia todo lo que encuentra a su paso.
Todo se confabula para lograr más profundidad y vibraciones más sutiles en nuestro cuerpo, emociones y mente; de esa forma pasamos a la intuición, esa cualidad o facultad de comprender las cosas al instante, antes de que entre en acción nuestros mecanismos de raciocinio. Es la mente superior. Nos sirve para entender el propósito de la vida. Entonces, vibrando en ese nivel, el sol toca nuestra alma.

Qué momentos tan especiales, pues aquí hay una hermandad afinada con el linaje de la Orden del Acuarius, que no solo asiste al Ceremonial, también participa activamente, lo que nos permite trabajar en equipo.
Las golondrinas, esas maravillosas y pequeñas aves que siempre andan en grupos. Son muy inquietas, rápidas, y se desplazan a través del mundo en busca del sol. Se reúnen en bandadas para protegerse, ayudarse y vivir en familia. El 'ser golondrina' tiene que ver con el compromiso y la entrega, la alegría y la amistad. 
El ashram del sector sigue avanzando; ya se comenzará con el 'SUM' y en un tiempo no muy lejano, la hermandad estará lista para emprender la construcción de una Cámara.

            Cuencame De paso para Torreón, visitamos la hermandad de Cuencame aprovechando el domingo, y fue muy grata la sorpresa. Todo tan bien preparado para una buena conversación, que disfrutamos muchísimo. La tertulia giró en torno al arte y conocimiento de una adecuada alimentación, algo imprescindible si se quiere provocar un cambio trascendental en nuestras vidas. Pero era tiempo de dejar de lado las teorías para degustar los deliciosos platillos que prepararon con amor.

El lugar fue adornado con mesas y sillas engalanadas para una fiesta, para celebrar la amistad y la fraternidad. Ricos platillos, provocativos postres, sirvieron de preámbulo para la colocación de la primera piedra de la futura sede de este bello lugar, habitado por gente sencilla y auténtica.


         Torreón. Otra hermosa sede propia de la RedGFU, ya casi con todo lo necesario y creciendo cada día. Un gran salón para todo tipo de eventos;  una hermandad atinada, que sabe
promocionar todo lo bueno que tiene para brindar, en una ciudad que lo necesita imperiosamente. Varios medios locales de televisión, radio y periódicos se juntan por invitación expresa de la RedGFU y con todo el protocolo, con un buen desayuno, para hacer preguntas. Fluye nuestra propuesta, que sirve a todos; inclusive solicitan que les demos más tiempo para otras entrevistas.
El vacío existencial en algunos lugares es enorme. La inseguridad, el miedo, el sinsentido, ganan a la confianza en la vida. Sucede esto en la cotidianidad de algunas
ciudades, porque los habitantes se alejan de lo mejor de sí mismos, de su propio centro, apoyándose solo en lo externo; así lo humano empieza a debilitarse y el medio ambiente, contaminado en muchos sentidos, influye negativamente, tiñendo todo de una oscuridad que debilita la esperanza.
La autodisciplina Integral para el desarrollo humano y transpersonal, que proponen la RedGFU y La Orden del Acuarius, están dando una salida real y posible a todo este vacío existencial y desesperanza, como puede constatarse con los seres humanos que se acercan día a día a nuestras sedes en muchos lugares del mundo. Al poco tiempo, con algo de esfuerzo personal, se puede recuperar esa confianza en la vida, la alegría y la certeza en la propia humanidad.
          Saltillo. Otra sede más de la RedGFU. Son tantas, y qué bien le hacen a la tierra, por eso son valiosas y seguirán multiplicándose en todas partes.
La felicidad, ¿es un mito o una realidad?, buen titulo para una conferencia en el Tecnológico. Se puede ser feliz en un mundo con tantas diferencias que parecen no terminarse. No solo es el dinero, la clase, la raza, el sexo; es que como
especie a veces somos especialistas en violencia, en marginación, en abandono de seres humanos de la misma familia, porque somos una gran familia en el mundo y no lo vemos. Entonces pareciera que ser feliz para mucha gente casi es un mito. Pero eso depende de un sinnúmero de factores, y casi todo depende de uno mismo. Ser feliz es algo completamente natural, todos lo merecemos y podemos ser plenamente felices, solo tenemos que aprender a aprovechar cualquier circunstancia que nos brinda el universo.
Incluso podríamos decir que los seres humanos a veces le tenemos más miedo a la vida que a la muerte. Lo importante es el mudra, la actitud ante la vida. No es solo un gesto, es
cómo te tomas cada situación, vivencia, éxito, fracaso o lo que sea que vivamos en el nivel de la persona.
Es que todo eso es efímero, pasajero, sin embargo le damos tanta importancia. Pero solo es la superficie de la vida; la plenitud realmente la logramos cuando hacemos que cualquier experiencia alimente nuestra alma, nuestro ser, y eso solo depende de nosotros.
Nuestro ser atrae lo que vivimos, y que de alguna manera lo necesita. Ahí se vuelve importante la actitud y lo que podríamos hacer para ser felices, saliendo al mundo a disfrutar de la vida. Gozar, bailar, pasear, nadar en el  mar, en los ríos, en todas partes donde veamos agua. Es que el agua cuando corre y envuelve nuestro cuerpo, nos da amor, nos limpia, nos nutre.
El aire, al movernos y bailar, nos acaricia; la tierra es bella si sabemos apreciar el paisaje y es muy sano viajar de vez en
cuando para valorar lo que tenemos cerca y lo que hay en otras partes. 
El calor fluye y anima la vida en cada célula, pero se potencia si lo percibes conscientemente y lo disfrutas. El sol, una playa, caminar, correr al aire libre. Aunque sea difícil de asimilar, nadie es culpable de lo que nos pasa y todos tenemos oportunidades si dejamos de culpar a algo o alguien de nuestra a veces doliente vida. Es que vemos casi todo malo, especialmente cuando estamos descentrados. Varía un poco la manera de ver la vida según el país, la gente, la moral, pero podemos teñirlo todo y podemos transformar algo bello en horrible, solo por la actitud y el color de cristal con que miremos. Pero cuando limpiamos ese cristal, todo se vuelve lo que realmente es: un planeta maravilloso, donde podemos ser completamente felices.
Desde el Ashram I. de Guadalajara, con 200 seres humanos maravillosos, en un simposio de Astrología y Ciencias Sagradas perfectamente organizado, donde la RedGFU se destaca por su Colegio Internacional de profesores de Cosmogenética, aprovechando maravillosamente bien la energía de la luna llena.

“La piel de rozarla con la piel se va agrietando
Los labios de no rozarlos con los labios se van secando
Los ojos de no cruzarlos con los ojos se van cerrando
El cuerpo de no sentirlo con el cuerpo, se va olvidando
El Alma de no entregarla con el Alma, se va muriendo”.
Bertolt Brecht



            Gurú Constancio                                       3/4/2015

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