El
Universo que vemos y palpamos, que es lo manifestado de esa inteligencia
superior que ES en todo, siempre está conectado a nosotros; eso es maravilloso,
ya que somos expresiones de Él como personas y como seres.
Sin embargo, somos nosotros los que muchas veces en el nivel de
esa conciencia individual, como hombres y mujeres, nos percibimos desconectados
del Universo.
Aún
debemos presentar todo en inglés; en cada país, hablar el idioma del lugar,
exteriorizar lo que traemos para la sociedad de una manera que nos puedan
entender en todo sentido.
Un
país tan práctico y concreto y con potencial también en lo sutil y espiritual
de la vida, pero que parece distraído solo en cosas mundanas; así que ver
norteamericanos emocionados y conmovidos al presenciar la práctica de la
Teúrgia, fue hermoso. Algunos de ellos
quieren que aprendamos muy bien el idioma, para así poder presentarnos y
mostrarnos en esta sociedad tan particular.
Playas,
cultura y desarrollo humano trabajando en armonía, son una buena mezcla para
generar conciencia y alegría. Las actividades y las experiencias en
la ciudad fueron muy buenas para todos, pero se superó en todo sentido la
hermosa convivencia de ashram y el Encuentro Nacional de Yoga.
Un
buen grupo humano que realizó un gran trabajo, sumando individualidades para
realizar un Encuentro que disfrutamos todos y que nos dejó muchas ganas de
repetirlo. Esto seguirá
creciendo.
Encuentro
del COIPYYY. El lugar elegido por los anfitriones no pudo ser mejor. Asistidos por el hábitat
natural: bosques, agua, flores e infinidad de vida, hicieron que fuera fácil
lograr el Yug, la experiencia profunda de sí mismo, frase que encierra una de
las mejores definiciones de lo que es el Yoga, salida del linaje de los Maestres
Serge R. de la Ferriére y José Manuel Estrada, y maravillosamente encarnada por
el Maestro José Marcelli.
Así
que aunque hubo talleres y conversaciones abiertas sobre el desarrollo integral
de la persona y el Ser, lo más importante fue la práctica externa, pero hacia
lo interno de uno mismo. Eso es el Yoga en todas sus posibilidades en el día.
Acompañados
de la naturaleza; el sol, el lago, las aves, infinidad de lotos amarillos y
todas las plantas colaboraron para encontrar la paz interior. En cierto
momento, profundizando en la meditación, viajamos como partículas de luz en las
Garzas, el lago, los peces, los árboles, las nubes, en cada rincón de ese
hermoso lugar, con las caricias suaves, cálidas y profundas, del Sol del
atardecer…
Luego
de este Encuentro Nacional, realmente especial del COIPYYY USA, con algunos
valiosos participantes de México, Canadá y Puerto Rico, en convivencia de
ashram, nos fuimos a descansar a la playa, a entregarnos al mar.
Casi
todo en este planeta está para disfrutar la profunda alegría de vivir, de estar
conscientemente vivo; cada experiencia incluso te lleva poco a poco a la
iluminación, experimentes lo que experimentes, pero todo depende de nuestro
estado interior.
Es
ahí donde el Yoga como sistema de sabiduría sigue vigente y cada día se volverá
más importante. Sobre todo el Yoga de linaje y tradición espiritual, no
comercial, porque trae las herramientas para construir ese estado interior.
No
necesitamos arreglar el mundo afuera para estar bien, lo primero es el mundo
interno, solo con ir hacia nuestra esencia y todo cambia mágicamente, poco a
poco. Entonces todo te conmueve, todo puede ser bello, todo te enseña, todo
puede resultar maravilloso, de todo puede fluir amor. Ir hacia nuestro Ser, es
ir al presente, al centro. Si llegamos al presente, la intensidad de cada
minuto es tan maravillosa que el tiempo se detiene; no hay pasado, no hay
futuro, solo el estado de Ser, y eso se transforma en plenitud.
Con
este Encuentro en Estados Unidos, renovamos nuestra energía interna, usando el
Yoga de manera Integral, como herramienta para encender el entusiasmo de existir.
Senderismo. Esta muy buena la propuesta
que el Gurú Carlos Garcia está prendiendo en varios lugares. Recorrer los senderos de
la vida en cualquier lugar; caminar, acampar, nadar, observando todo y
simplemente integrarse a la naturaleza resulta interesante. Es que en este caso
caminamos, viajamos, acampamos, conocimos diferentes lugares y también
disfrutamos de juegos en un gran parque y de las playas. A una de ellas
llegamos al atardecer, lo que nos permitió descubrir muchísimas estrellas de
mar, en grupos de diferentes tamaños, tantas que mirándolas en el fondo, eran
como un cielo diferente, pero también
lleno de estrellas, cientos de ellas.
Una
hermana Getuls, a quien motivamos a disfrutar de nadar un rato, pues no se
animaba a hacerlo, aunque vive por el lugar y ve el mar todos los días, al
salir del agua comentó muy contenta: “Salvaré esta experiencia para no
olvidarme, como dice el Maestro Gustavo Toro”.
"¡Qué
bien!, respondo, y le pregunto, "¿Por qué?". “Es que no tenía ganas
de meterme; estaba cansada, además, es incómodo y le tengo un poco de miedo al
mar aunque sé nadar. Ahora resulta que disfruté mucho; estoy relajada, contenta
y también le perdí un poco de miedo al agua, gracias a que me motivó a
meterme.”
Esto
hacemos con nuestras vidas en muchos pequeños detalles. Nos cuesta disfrutar
del presente y de muchos buenos momentos porque es incómodo, no es normal, no
es lo adecuado, por no salir de la segura rutina. En fin, un montón de excusas
que solo surgen de la pulsión de muerte que, agazapada, incide en nuestras vidas, en forma de
estructuras rígidas.
-¿Maestro
como debería ser la Educación en nuestros jóvenes?-
En muchos lugares del mundo, se
evidencia la incertidumbre que crece en esa etapa; con todo lo que comparten
los adolescentes cuando se acercan, se puede afirmar que la educación que
recibimos en casi todas partes, y que seguimos impartiendo a nuestros hijos, no
nos sirvió de mucho. Y si no hacemos cambios estructurales, profundos, no
tendrá utilidad alguna para nuestros jóvenes, pensando en una vida plena no
solo en éxito material.
Tal
vez una forma de educación que fortalezca nuestros sueños, que nos haga únicos
y creativos, porque esta que tenemos es conveniente para el sistema, en virtud
de que parece querer fabricar robots, gente alienada, que quiere dar la
impresión de que es libre, que elige conscientemente lo que quiere.
Algunos
con esa “educación”, trabajando mucho, podríamos sobrevivir quizás, pero
nuestra vida se volvería casi miserable, rutinaria, dedicada simplemente a la
supervivencia, prácticamente vacía de amor. El punto es que después de una
larga vida de esfuerzos, a veces nos damos cuenta de que el sistema se nutre de
nuestra ignorancia, que nos da monedas a cambio de dejar más de media vida en
el trabajo, olvidándonos de lo más importante.
Además,
por la falta de verdadera felicidad, la violencia crece en nuestros hogares,
donde los más débiles son maltratados. Ese entorno obliga a huir a los
adolescentes, cuando no optan por el suicidio. Prefieren renunciar a la vida a
enfrentar el maltrato y la falta de amor. La escuela, lejos de mitigar el
dolor, lo exacerba. Necesitamos una educación para la vida, que genere seres
humanos felices y que les ayudemos a desarrollar esa capacidad.
En
una sociedad tan cruda, regida por la 'ética' del mercado, del consumo por el
consumo, o sea la ética sin ética, sin valores, totalmente deshumanizada,
escuchar en Atlantic City, que una joven se suicida empujada por el acoso de
sus compañeros, amenazada de muerte y maltratada, por el simple placer que
produce el dolor del otro, ya casi no llama la atención. Donde la generalidad
de los adolescentes usa drogas para sobrellevar el dolor del abandono, para
mitigar los absurdos del mundo. Los propios padres se convierten en víctimas de
sus hijos adictos, muchos de los cuales
incurren en delitos, que acaban por marginarles de por vida. Quizás el
amor pudo salvarles, pero eso fue justamente, lo que nunca tuvieron.
Solo
el amor que fluye de la mente superior en nosotros mismos, por encima de
nuestros sentimientos, placeres e ideas, nos puede hacer superar tantas
diferencias que estamos provocando como sociedad.
Hay que
sostener el esfuerzo por aportar algo mejor al mundo con amor y esperanza, esa
maravillosa confianza en la vida, con tantos matices amorosos, que nos sigue
entusiasmando para seguir evolucionando a pesar de que a veces la realidad nos
aplasta, dejándonos sin energía y haciéndonos perder el juego ese día. Lo bueno
que cuando vamos experimentando el juego, nos damos cuenta que mañana lo
podremos hacer mejor, aprendiendo del fracaso o la derrota, así podemos hacer
de cualquier circunstancias que vivamos, un medio que nos ayude a ganar el
juego de hoy.
El 28 de julio natalicio del S. Hermano Mayor.
Desde la tenue
luz, que gustamos de un cielo maravillosamente lleno de estrellas, incluso
algunas fugaces pero que antes de apagarse dejan huella. Todo fue especial: en
la armonización muy temprano, pasando por el Wu Shu danzando, la luz del sol al
amanecer, la energía del Ceremonial, las reuniones y acuerdos, asanas, trabajos
de Cámara Secreta y la convivencia, hasta la luz en el césped de cientos de
luciérnagas moviéndose traviesas por la noche.
Bella, profunda, la alegría y la luz que esta fluyendo en el MHCC. En el
día del nacimiento del Hermano Mayor, todos percibimos su asistencia, desde lo
sutil e invisible de la vida, dándole fuerza a esta gran obra…
"Todo lo
que somos es el resultado de lo que hemos pensado. Si un hombre habla o actúa
con astucia, le sigue el dolor. Si lo hace con un pensamiento puro, la
felicidad lo sigue como una sombra que nunca lo abandona. Así como una vela no
brilla sin fuego, el hombre no puede existir sin una vida espiritual. La paz
viene de adentro, no la busques afuera." Buda.
Gurú
Constancio Coatepec A.I.M. 28 de Julio 2015
No hay comentarios.:
Publicar un comentario