El chisme, ¿un antimantra, un mantra oscuro?
No parece un tema tan importante comentar algo sobre lo que se define
como chisme; un hábito humano que consiste en hablar de alguien, en bien o en
mal, aunque generalmente de forma desfavorable, sin que la persona en cuestión
esté presente.
Es sinónimo de embuste, fábula, cuento,
historia, mentira. Pero como está tan naturalizado y promovido en nuestra
sociedad, es importante tomar conciencia de sus efectos. El chisme es algo que
crece solito, solo necesita seres humanos que lo alimenten, y en eso somos
especialistas...
¿Pero qué tiene que ver el chisme con un
mantra? Nada, pero en cierto modo es justamente lo opuesto. La palabra vacía,
el hablar por hablar, aun sin saber a ciencia cierta lo que es real. A veces
con contenido negativo y una fuerza en realidad con tendencia destructiva, pues
es algo que hacemos generalmente inconscientemente.
Cuando 'pasamos' un chisme, que nació
seguramente con una semilla, pero de 'no ser', asumimos, sin saberlo, las
consecuencias que ello acarrea. Eso hace que a veces las palabras maten.
Además, los chismes y los rumores se apoyan en algunos dichos como “Cuando el
río suena, piedras trae”. Se puede llamar al chisme de muchas maneras y también
se pueden inventar muchas excusa para justificarlo, pero sigue siendo ese mal
hábito de ayudar a rodar comentarios que a veces destruyen vínculos o arruinan
la reputación de alguien; es por eso que el chismoso aparta a los mejores
amigos.
Muchas amistades, relaciones, vínculos, se
arruinan por malos entendidos, que comenzaron con un chisme. Tristemente,
algunas personas se benefician con algún comentario que incluso afina con sus
ideas o sospechas y eso les da la oportunidad para echar abajo lo que les
parece que debe destruirse y fomenta. Lo paradójico es que el chisme incluso
puede tener muy buenas intenciones.
Por eso es conveniente saber lo que es un
mantra. La palabra mantra pertenece al sánscrito, y proviene de las raíces
etimológicas man, mente, pensar; tra, liberarse, protegerse,
instrumento. En este sentido, el mantra es un recurso para proteger a la mente
contra los ciclos improductivos de pensamiento y acción. Un chisme es
justamente algo improductivo en el sentido de evolución, pues genera en nuestra
mente más confusión. Pero mantra también quiere decir 'conjuro mágico'. Se
puede expresar como equivalente de 'palabra de poder' cuando es utilizado en la
magia blanca; es el poder de ser o la voluntad de lo superior. El chisme tiene
también su poder.
Cuando hablamos de mantram o mantra estamos
diciendo muchas cosas importantes con respecto al manejo del sonido y en
especial de la palabra hablada, cantada. El mantra contiene una semilla de luz, Bija, que da
vida, crece y puede multiplicarse; posee una fuerza que puede ser poderosa,
Shakty y algo que lo sostiene, una columna, Tilaka. Una semilla importante,
necesita una gran fuerza y una columna significativa.
El mantra es de algún modo una plegaria
especial que no pide nada. Son palabras que conectan con el orden secreto, y
cantadas con cierta cadencia rítmica, logran una vibración especial para
provocar efectos especiales. Otras veces tienen usos mágicos de encantamiento.
Para algunas culturas, el mantra es una fórmula mágica de encantamiento
sagrado, un sortilegio, un himno de alabanza, una salmodia o letanía.
Pero así como la vibración del verbo puede
construir, también puede destruir. Pensamos que las palabras se las lleva el
viento, y en parte es cierto, pero cuando contienen mantra, pueden superar el
tiempo y transformarse en algo eterno. Si vemos los frutos de las palabras de
algunos seres humanos de nuestra historia, entenderemos el mantra; como las
enseñanzas de Pitágoras, Buda, de Jeshus. Pero aún hay más: el mantra contiene
magia, la magia de la vida, de salir de algo que emana de la fuente, porque
debe nacer desde el Ser, en lo humano, transformarse en sonidos, palabras, y
llegar con su vibración al ser, en otros seres humanos y al planeta.
Es por eso que la palabra hay que cuidarla
mucho, incluso cuidarnos de nosotros mismos a la hora de ponerle alguna carga a
la palabra. A veces, por descuido, transformamos una versión de algo que nos
cuentan en algo diferente, y con una semilla no precisamente de luz, es ahí
donde a veces el chisme cobra una fuerza que parece un mantra que contiene una
semilla que oscurece, hace daño, genera desconfianza. Esto se refuerza con el
dicho popular, 'Si tanto hablan, algo habrá de verdad'.
La 'semilla' de un chisme incluso contiene,
se alimenta y crece con la envidia, los celos, el resentimiento, la
desconfianza. De otra parte, un chisme podría diluirse rápidamente, pero, por
inconsciencia, a veces lo alimentamos y lo transformamos en casi una verdad de
tanto repetirlo. Lo más normal es que si el chisme coincide con lo que pensamos
o sospechamos de la persona de la que se habla, entonces ya lo tomamos como
verdad.
Hay personas que van por la vida queriendo
llevar registro de todo lo que pasa en la vida personal de quienes comparten su
mismo grupo social, ya sea su trabajo, su salón de clases, su barrio. En
realidad lo que está detrás de esa necesidad es la intención clara de
involucrarse en la vida de los demás, de dar opiniones a terceros de todo lo
que les ocurre, tan solo como hobby.
Como es sabido, los chismes viajan a gran
velocidad; bastan unos pocos segundos para que
algo diminuto e intrascendente termine siendo un gran problema, algo de
gran tamaño, inmanejable.
En los grupos hay que evitar los chismes; no
digo detestarlos, porque a veces solo son una broma. Pero es bueno identificar
a las personas chismosas, a fin de estar atentos y 'filtrar' cuando algo llega a nuestros oídos; de qué
forma actúa lo que escucho, de qué manera puede frenarse, cómo discriminar la
'información' para saber si contiene algo de verdad.
Cuando se ha identificado al que tiene ese
mal hábito, cómo abordarlo sanamente para que se dé cuenta de que puede dañar
con esa conducta. También hay que ponerle freno a un ambiente lleno de chismes,
que lastima y estropea la tranquilidad y el trabajo de todos.
Lo mejor es evitar reproducir el chisme,
porque en ocasiones por creer que es verdad, nos convertimos
en 'difusores' del mismo y hasta le agregamos algo de nuestra
imaginación.
Hay psicólogos que afirman que el chisme es
una enfermedad contagiosa, incurable, en aquellos que les gusta vivir
escuchando la opinión pública. Lo interesante es que un chisme puede ser
verdad, mentira o una verdad distorsionada, pero no dejará de ser un chisme.
En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso
por la sabiduría que desprendían sus palabras, y por le tenían un alto respeto.
Cuentan algo muy interesante, que nos serviría de mucho para aprender a dejar
de hablar en vacío o hacer correr un chisme, algo que ya sabemos termina siendo
negativo para todos, especialmente para el que lo genera.
Un día, un conocido se encontró con el gran
filósofo y le dijo:
-¿Sabes lo que escuché acerca de tu amigo?
Espera un minuto, replicó Sócrates. -Antes
de decirme cualquier cosa querría que pasaras un pequeño examen. Es llamado el
examen del triple filtro.
-¿Triple filtro?
Correcto, continuó Sócrates. -Antes de que
me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea tomar un momento y filtrar
lo que vas a decir. Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro.
-El primer filtro es la verdad: ¿estás
absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?
-No, dijo el hombre, realmente sólo escuché
sobre eso y...
... Muy bien, dijo Sócrates. ¡Entonces
realmente no sabes si es cierto o no!
Ahora permíteme aplicar el segundo filtro,
el filtro de la bondad: ¿es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?
-No, por el contrario...
-Entonces, continuó Sócrates, tú deseas
decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto. Tú puedes
aún pasar el examen, porque queda un filtro; el filtro de la utilidad: ¿será
útil para mí lo que vas a decirme de mi amigo?
-No, realmente no.
-Bien, concluyó Sócrates. Si lo que deseas
decirme no es cierto ni bueno e incluso no es útil, ¿por qué decírmelo?
La solución es tan simple como nos
enseña este gran filósofo. Cuidarnos de generar comentarios innecesarios, o sea
saber callar, osar callar, querer callar… Esto es base de la Iniciación. Si en
las instituciones, grupos, asociaciones, partidos políticos, los medios de difusión,
aplicáramos esta simple regla, esta sociedad avanzaría más rápido hacia
una iluminación auténtica, que es la
verdadera posibilidad de todos los seres humanos.
Lo que fluya de
nuestra boca… que tenga mantra, la palabra llena de amor, de verdad, de luz, de
vida.
Gurú Constancio Desde la Sede Mundial 13-8-15
Que bueno su comentario Maestro
ResponderBorrarme pela el pito
ResponderBorrarusted es un charlatan tenemos camaras en ashram
ResponderBorrarponte verga
ResponderBorrarel guru consentido o del amor!....CHARLES MANSON PAX
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