“A cada uno su dominio, a cada uno su elemento; el que quiera que se le admita en la morada de los ángeles, debe esforzarse por vivir, como ellos ahora, en este “esbozo” de vida.” S. R. de la F.
-¿Maestro en una realidad dual, podremos vivir conscientes de la unidad?
Claro que sí, conectando ese mundo cuántico y trascendiendo esa polaridad de la vida sin descartar ninguna de sus posibilidades, porque dos polos opuestos equilibrados generan luz. Todo tiene dos polos…en lo ácido y alcalino de nuestro cuerpo, el balance lo es todo. La vida y la muerte parecen ser dos cosas diferentes, incluso si hablamos de Eros y Thanatos, parecen completamente opuestos y de hecho lo son, sin embargo también se puede afirmar que son complementarios, no va uno sin el otro: amor y odio, nacimiento y muerte, cóncavo y convexo, pulsión de vida y pulsión de muerte.
Eros y Thanatos
Sigmund Freud fue quien utilizó por primera vez los nombres de Eros y Thanatos para referirse a los dos instintos básicos que actúan y ¨dirigen¨ la vida en el ser humano, relacionándolos con dioses de la mitología griega.
Eros el dios del amor para los griegos y Cupido (llamado también Amor en la poesía latina) es, en la mitología romana, el dios del deseo amoroso.
Eros y PsiqueEs el mito que cuenta el amor de Eros con Psique, la hija menor del Rey de Anatolia, su inigualable belleza la mantenía soltera, pues nadie se atrevía a pedir su mano de tan hermosa que era. Los habitantes de su aldea, decidieron adorar la belleza de Psique y se olvidaron de Afrodita. Entonces la Diosa, celosa de ella, envió a su hijo Eros, a herir a Psique con una flecha vieja y oxidada, que haría que ella se enamorase de alguien horrible.